Procesos de lubricación
Procesos de lubricación
Para conseguir el proceso de lubricación se mezcla el aire con una neblina de aceite que, arrastrada por el mismo, llega a las diversas partes del circuito. La figura 30 muestra la consecución de la neblina de aceite.
El aire entra en el lubricador a través de un estrangulamiento, lo que obliga a aumentar su velocidad en el tramo estrangulado. Como consecuencia se produce el efecto venturi y por diferencia de presiones aspira el aceite del tubo que, al tomar contacto con el aire, es pulverizado y arrastrado en suspensión por todo el circuito. Este procedimiento es denominado niebla de aceite.
En este sistema, la pulverización se realiza en dirección diferente a la salida del aparato, con lo que la mezcla de aire – aceite debe cambiar su dirección para pasar de A a B saliendo despedida, por efecto de la fuerza centrífuga, aquella cantidad de gotas más gruesas que caen al depósito, quedando en el aire y en suspensión las gotas más finas que engrasan los órganos del circuito.
Proceso de estrangulación del aire comprimido.
Este lubricador actúa de la forma siguiente: el aire, previa filtración y regulación (limpio), entra en el aparato y el paso por el estrangula- miento le hace adquirir gran velocidad (aumento de la presión dinámica y descenso en el estrangulamiento de la presión estática).
Cuando se produce un consumo en la salida (S), la vena de aire comprimido se pone en movimiento y, como en el interior del depósito de aceite existe una presión (Pa), el aceite sube por el tubo (8) y la cámara (11) lo deposita (la válvula de retención —10— cierra el paso del aceite de la cámara —11 — al depósito).
El consumo hace que en (P) exista una presión estática y, por tanto, el aceite cae hacia el estrangulamiento, donde la corriente de aire comprimido lo arrastra (en partículas pequeñas, tanto más pequeñas cuanto mayor sea la velocidad de la corriente de aire comprimido) en forma de niebla hacia la salida y las utilizaciones.
Al parar el consumo se restablece el equilibrio entre (P) y la presión en el depósito y, naturalmente, el aceite no desciende al canal (P).
El tornillo de regulación (1) controla las gotas de aceite necesarias (5 a 12 rpm).
Como vimos al principio existen dos procesos fundamentales de lubricación: los llamados de neblina de aceite (oil-fog) y los de microneblina (micro-fog).